martes, 12 de octubre de 2010

Curiosidades en el tren

Todas las mañanas me embuto en uno de esos trenes en los que, vistos desde fuera, parece imposible que pueda haber tanta gente dentro y meterse aún más en cada estación, pero apretando más caben.
Por supuesto, sentarse es toda una odisea. Yo normalmente hasta Shinjuku -con suerte- no consigo sentarme. Eso implica solo 5 minutos sentada, pero es algo.
La gente que va sentada suele ir durmiendo. Muchas veces me pregunto cómo hacen para no pasarse de parada. Yo me suelo dormir cuando vuelvo a casa y voy sentada, pero tengo la habilidad de despertarme en todas y cada una de las paradas. En cambio, la gente que veo a diario va durmiendo del tirón.
Hoy me fijé en una mujer que llevaba colgando del cuello un aparato con un cordon demasiado grueso para ser unos auriculares. Llevaba una especie de reloj temporizador colgando del cuello, como los que hemos usado muchos en algún momento en casa para despertarnos por la mañana. Eso sí, más pequeño y colgando de un cordón enganchado al cuello.
Según nos acercábamos a Shinjuku el aparatito empezó a pitar y la mujer se despertó. Yo aproveché para dar un par de codazos y empujones y sentarme en su sitio -no hay otro modo que tirar de violencia por las mañanas-.
La verdad, es una buena idea lo de llevarte un despertador para el tren por la mañana. Lo raro es que en algo más de un año sea la primera vez que lo vea.

2 comentarios:

  1. Creo que deberías matizar que los asientos del tren son muy blanditos y cómodos y como nadie habla por el móvil ni tienen la música puesta ni hacen ruido, es muy fácil quedarse dormido. Sarai y yo nos dormimos varias veces en la línea yamanote(como es la circular no pasa nada si no te despiertas jejeje)

    Tu bro

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  2. Esas siestas en la Yamanote que no falten XD

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